Un total de 271 nadadores elevaron el llamado de “¡Las Clases de Natación Salvan Vidas!” en las distintas sedes de El Delfín de Chiapas, al celebrarse este jueves 20 de junio la décima edición de The World’s Largest Swimming Lesson™ (La Clase de Natación Más Grande del Mundo, por sus siglas en inglés).
Para esta edición, El Delfín obtuvo una nueva cifra récord de participantes, pues en 2018 fueron 266 los alumnos que acudieron al llamado, mientras que en este 2019 se incrementó a 271 nadadores.
En este mismo sentido, vale la pena señalar que cientos de albercas, clubes y parques acuáticos de todo el mundo se sumaron también a la causa global, que busca concientizar a la población sobra la importancia de aprender a nadar como medida de prevención para evitar ahogamientos.
El Delfín fue una de las 650 sedes registradas en el planeta y sus tres instalaciones (Oriente, Poniente y Centro de Entrenamiento) fueron partícipes de las diversas recomendaciones para manejarse con responsabilidad en áreas acuáticas y, en caso de ser necesario, auxiliar a alguien que esté en peligro de ahogamiento sin ponerse en riesgo.
Asimismo, se efectuó la parte práctica de la clase, con diversos ejercicios de flotación y desplazamiento en la alberca.
Mónica Anzueto Moguel, directora pedagógica de El Delfín de Chiapas, recordó que la clase surgió en los Estados Unidos, pero tiene un impacto mundial, siendo el objetivo principal es mandar el mensaje de que las clases de natación salvan vidas y que los ahogamientos se pueden prevenir.
“Los primeros seis años fue un evento que buscaba romper un Récord Guinness, con el objetivo de llamar la atención”, dijo la profesora Mónica Anzueto, quien agregó que “la natación es un deporte maravilloso que se puede practicar desde que naces hasta que eres adulto y nunca es tarde para aprender”.
Por su parte, la nadadora Alejandra Hernández Ordaz, destacada exponente nacional e internacional en aguas abiertas, invitó a los padres de familia a motivar a sus niños a tomar clases de natación, fomentando con ella la seguridad acuática, los valores y la recreación, mensaje que se extiende a través de The World’s Largest Swimming Lesson™.
“Es demasiado importante que aprendan a nadar porque así prevenimos ahogamientos, accidentes dentro del agua y es una actividad bastante completa para todos los niños y si tenemos niños con mucha energía, la natación absorbe todo eso, aparte de que nos divertimos, aprendemos y prevenimos lo que son los ahogamientos”.
Finalmente, vale la pena recordar que, la primera ocasión que se efectuó The WLSL, un total de 3,892 participantes se unieron al llamado y una década después, el reto es superar la cifra de 41,814 que tomaron parte en 2018, dato que se conocerá en próximas semanas, tras recopilar la información generada en los 30 países participantes.
